El síntoma más repetido: “no encontramos a nadie”
Cada semana, empresas de todos los sectores lo repiten como un mantra: “no hay gente”. No encuentran responsables de producción, jefes de operaciones, perfiles técnicos, mandos intermedios con visión estratégica ni talento con experiencia en gestión.
Al mismo tiempo, miles de profesionales siguen buscando oportunidades que encajen con su experiencia, valores y necesidades. La paradoja es evidente: empresas que no encuentran y personas que no se sienten encontradas. ¿Qué está fallando?
Más que un problema puntual: un cambio de fondo
La escasez de talento no es una moda ni un fenómeno cíclico. Es el resultado de varios factores estructurales que se combinan:
- Envejecimiento de la población activa, especialmente en mandos intermedios industriales, técnicos o sanitarios.
- Ausencia de relevo generacional en puestos de responsabilidad.
- Desajuste entre la formación disponible y las competencias reales que demandan las empresas.
- Cambios en las prioridades de los candidatos: flexibilidad, estabilidad, conciliación, cultura organizativa.
- Ofertas laborales poco actualizadas o sin propuesta de valor real.
El mercado no se ha vaciado. Lo que ocurre es que ha cambiado. El talento existe, pero no siempre está visible, disponible ni dispuesto bajo las condiciones habituales.
¿Por qué ya no basta con publicar una oferta?
Hace unos años, publicar una vacante y filtrar CVs podía ser suficiente. Hoy, esa lógica ya no sirve. Los perfiles más demandados no se están postulando: muchos ya tienen trabajo, otros solo se moverán si encuentran una propuesta que tenga sentido.
Además, el proceso de búsqueda se ha vuelto más complejo:
- Hay que entender en profundidad qué necesita una empresa, más allá del título del puesto.
- Hay que saber “leer” el mercado: dónde está el talento, qué busca, qué valora, cómo se comunica.
- Hay que construir un relato claro, realista y atractivo para que el perfil adecuado se interese.
Todo eso requiere tiempo, análisis, contexto y, sobre todo, capacidad para conectar realidades distintas: la de la empresa y la del candidato.
El papel clave de quienes se dedican a buscar bien
En este nuevo escenario, contar con una empresa especializada en selección ya no es un lujo: es una necesidad estratégica. No se trata solo de buscar más. Se trata de buscar mejor.
Desde onhunters lo vivimos cada día: procesos que requieren identificar perfiles técnicos con visión directiva, mandos intermedios con competencias blandas desarrolladas, líderes de equipo que sepan adaptarse a entornos cambiantes. Y hacerlo en sectores con alta rotación, envejecimiento, cambios tecnológicos o tensión operativa.
Acompañamos a las organizaciones en:
- Redefinir lo que realmente necesitan, no solo repetir descripciones estándar.
- Traducir esas necesidades en propuestas laborales competitivas.
- Conectar con talento real que a menudo no está buscando, pero sí escuchando.
- Gestionar procesos con cercanía, profundidad y enfoque humano.
Conclusión: el talento no ha desaparecido. Solo ha cambiado de lugar.
Quien sepa dónde buscarlo, cómo atraerlo y qué ofrecerle, marcará la diferencia. En un mercado donde todos compiten por los mismos perfiles, no gana quien más publica. Gana quien mejor entiende.